La recuperación del contexto natural y de los espacios tradicionales del jardín mediterráneo hacen de este parque situado en el entorno del Doce de Octubre (Usera), una de las propuestas arquitectónicas más interesantes de finales de los noventa, realizada por el taller de arquitectura de Ricardo Bofill. Las huertas, los olivares y el cauce natural del río son el marco que envuelve la Caja Mágica, el Centro de Tenis de Alto Rendimiento, diseñada por Dominique Perrault.
Tres elementos vertebran el parque en su conjunto: el trazado del río propiamente dicho, un eje peatonal que atraviesa el parque en línea recta como alternativa al río y una trama ortogonal de caminos.
Recorriendo el parque de norte a sur se encuentran la Plaza Verde, con forma de media luna; el Paseo de los Sentidos, bordeado de grandes árboles con una pasarela peatonal de grandes dimensiones, plazas cuadradas con laberintos, un umbráculo frondoso y dos fuentes con juegos de agua; una Pérgola; el Área de los Deportes con dos campos de fútbol, pistas polivalentes, una zona de juegos infantiles, vestuarios y aseos; la Pradera, un gran césped de grandes dimensiones y el Parque del Belvedere, con juegos infantiles y de petanca.
El punto más alto del parque se encuentra coronado por La Dama del Manzanares, una escultura realizada en bronce y acero en el año 2003, a partir de un diseño del artista valenciano Manolo Valdés, dedicada al río que cruza la ciudad. Mide 13 metros de altura y está situada en la cima del cerro artificial de La Atalaya, que fue elevado a modo de mirador de la ciudad sobre una plataforma piramidal de 21 m de altura, diseñada por Bofill. Representa la cabeza de una mujer, con el rostro orientado hacia el casco urbano madrileño. En 2005 fue inaugurado un sistema de iluminación, que consta de 24 proyectores, cuyas tonalidades cambian con cada estación.