Tras una ambiciosa reforma, este alojamiento, con 110 años de antigüedad, reabre sus puertas de la mano de la cadena hotelera Mandarin Oriental, que ha conservado el carácter único del estilo Belle-Époque del edificio y el espíritu original concebido por el célebre hostelero César Ritz, su director originario. Sus 100 habitaciones y 53 suites, lujosamente decoradas con un elegante estilo residencial “clásico contemporáneo”, realizado por los famosos diseñadores parisinos Gilles & Boissier, ofrecen a sus huéspedes lo último en alojamiento urbano de lujo.
Entre sus muchas novedades destaca la recuperación de la emblemática cubierta de cristal ubicada en el centro del hotel. Por otra parte, el hotel exhibirá una selección de obras de arte y piezas inspiradas en el fuerte vínculo que lo une a la ciudad que lo acoge.
En cuanto a su oferta de restauración, el chef Quique Dacosta, uno de los cocineros más famosos de España, ha sido elegido para diseñar, llevar a cabo y supervisar todas las operaciones culinarias de los cinco restaurantes y bares del hotel.
Deessa, un exclusivo restaurante, dirigido por el propio Quique Dacosta, con vistas al famoso jardín del hotel y con una mesa oculta del chef en la que algunos privilegiados podrán ver, in situ y muy puntualmente, la perfecta coreografía de todo el equipo de cocina en marcha, Palm Court, un restaurante abierto durante todo el día, donde el té tradicional de la tarde se sirve bajo una espectacular cubierta de cristal, El jardín del Ritz, un oasis urbano con animadas comidas al aire libre, Pictura, un bar respaldado por una galería de retratos en la que han participado conocidos artistas y creadores españoles y con un menú de cócteles clásicos y el Champagne Bar, un exclusivo menú de tapas maridados con lujosa selección de champanes.
Además el hotel cuenta entre sus instalaciones con una piscina climatizada interior, una piscina de vitalidad, duchas de sensaciones, una sala de vapor y un moderno gimnasio.
Descanso de actores y nobles
La más distinguida de todas sus estancias es la Royal Suite, situada en la primera planta y con casi 190m2, que cuenta con amplios balcones privados con vistas al Museo del Prado y la Plaza de la Lealtad y está ubicada en el mismo lugar en el que César Ritz la diseñó y en el que, durante más de 100 años, se alojaron realeza y celebridades.
Entre las familias reales que se han alojado en él se encuentran la de Mónaco, el Maharaja de Kapurtala y su mujer, el príncipe y la princesa de Gales, el duque de Windsor y su esposa. La lista de estrellas de Hollywood también es amplia: Henry Fonda, Cary Grant, Orson Welles, Rita Hayworth, Sofia Loren, Elisabeth Taylor, Richard Gere, Warren Beatty, Mel Gibson, Jodie Foster o Julia Roberts son algunos de los que han pasado por este hotel centenario.