La Neomudéjar organiza del 3 de febrero al 28 de marzo una exposición monográfica del autor argentino Gabriel Grun, donde revisiona el Renacimiento, el Barroco o la escuela flamenca al tiempo que indaga en conceptos ocultistas.
Se trata de una colección de trabajos diseminados por un amplio arco temporal que reflejan sus inquietudes y sensibilidades a través de un universo diferencial que evoca situaciones surrealistas. Conjuntamente, Grun logra sorprender al público con hallazgos simbólicos que ahondan en la mitología, el clasicismo o el lenguaje.
Nacido en Buenos Aires (Argentina) en 1978, Gabriel Grun es un pintor figurativo autodidacta que bebe de la línea de los antiguos maestros pictóricos, pero cuyas piezas comprenden tintes contemporáneos.
Así, sus obras recuerdan a cuadros de Caravaggio, Holbein, Ribera, Rembrandt, Durero o Van Eyck, pero en ellas explora los reinos de la sexualidad, la fantasía y la naturaleza de una manera original.
Desarrolla sus lienzos por medio de sus propias pinturas elaboradas con aceites y pigmentos. Además, estructura sus figuras con composiciones geométricas guiadas por los diseños de Leonardo Da Vinci.
Sus creaciones se han exhibido en pinacotecas como el Museo Halle Saint Pierre de París (Francia), la Galería Wussmann de Milán (Italia), la Galería Transarte, el Museo Eduardo Sívori o el Museo de Arte Tigre de Buenos Aires o el Museo Europeo de Arte Moderno de Barcelona.